Traducción latinoamérica

Jueves 21 de marzo, 2013 a las 20:00 hrs.

Mi amadísima hija, cómo se rompe Mi Corazón por la aflicción que está siendo sentida por las almas que están en confusión por la huida de Mi último Papa, Mi amado Benedicto.

Vosotros Mis estimadas almas, os sentís muy confundidas y, algo solas. Yo siento vuestro dolor y debéis rezar mucho por Mi Mano Misericordiosa, para que así pueda alcanzar a consolar vuestros afligidos corazones. 

Este será un tiempo de traición para ti, hija Mía, ya que muchos de aquellos que se habían puesto de parte de esta Santa Misión, se marcharán. Debes aumentar el tiempo que dedicas en Adoración Eucarística a siete días a la semana y solo entonces serás capaz de caminar sola y sin miedo, para completar las tareas, que te daré, muchas de las cuales serán extremadamente difíciles. 

Debéis permanecer fuertes, todos vosotros, en este momento. No debéis escuchar a aquellas voces de condena, que pondrán vuestros nervios de punta y que aumentarán en grandes cantidades, mientras la Semana Santa llega.

Toda calumnia, toda mentira, toda objeción perversa para estos, Mis Santos Mensajes para el mundo, serán vuestra cruz a soportar por los próximos diez días. Ni por un momento os será permitido, Mis seguidores, descansar, rezar o  contemplar Mi Santísima Palabra.

Tened en cuenta que sin la protección del Santo Rosario, que debe ser rezado diariamente, os dejaréis vosotros mismos abiertos a las dudas, que no provienen de Mí. 

El momento para la división está pronto y debéis prepararos. Deseo daros una gracia especial, para ayudaros a resistir la persecución y las presiones, que serán colocadas sobre vosotros, para alentaros a que os retiréis de Mis Mensajes. Se necesitará una gran Fe, confianza y nervios de acero, para centrarse en Mi Santa Palabra, y por lo tanto, debéis decir esta Cruzada de Oración, una vez al día, de ahora en adelante. 

Cruzada de Oración (102) para Mantener la fe y creer en el Mensaje de Dios para el mundo.

"Querido Jesús, cuando esté deprimido, levántame.

Cuando dude, ilumíname.

Cuando esté afligido, muéstrame Tu Amor.

Cuando critique, ayúdame a permanecer en silencio.

Cuando juzgue a otro públicamente, sella mis labios.

Al proferir blasfemias, en Tu Nombre, redímeme y tráeme de vuelta a Tu protección.

Cuando me falte valor, dame la espada que necesito para hacer batalla y salvar a las almas que deseas.

Cuando me resista a Tu Amor, ayúdame a rendirme y abandonarme, completamente, dentro de Tu Amoroso cuidado.

Cuando me aleje, ayúdame a encontrar el Camino de la Verdad.

Cuando ponga Tu Palabra en duda, dame las respuestas que busco.

Ayúdame a ser paciente, amoroso y amable, incluso con los que te maldigan.

Ayúdame a perdonar a los que me ofenden y dame la gracia que necesito para seguirte hasta los confines de la tierra.

Amén”.

Id, Mis preciosos seguidores y recordad que vuestro deber es para Conmigo, vuestra Iglesia y a Mis Enseñanzas. Tomad la Espada de la Salvación y con ella combatid Conmigo para llevar a cada alma, incluyendo aquellas que pecan contra Mí, dentro de Mi Reino.

Vuestro Jesús