30 oct 2012
En este momento en el mundo, la sola mención de una Fe (creencia) en Mí, vuestro Jesús, crea vergüenza
Martes 30 de Octubre, 2012 a las 19:10 hrs.
Mi muy querida hija debes saber, a estas alturas, que el sufrimiento que sobrellevas en Mi Nombre, continuará hasta el último día de esta misión.
Esto es difícil para tí escucharlo, pero conoce esto: Esta misión es la más difícil de todas las misiones, las cuales vinieron antes que tú. Tú serás lanzada en el desierto y te sentirás aislada y sola. Tu voz será ignorada, pero Mi Santa Palabra tocará los corazones de millones.
Mi Santa Voluntad, será atendida por tí en todo momento a pesar de que a menudo sientes que no serás lo suficientemente fuerte.
Tu debilidad es tu fuerza debido a tu confianza en Mí. Por esto, Yo nunca te abandonaré ni te dejaré sin la ayuda de otros. Sin embargo, caminarás sola en esta misión. Tu único compañero seré Yo. Yo junto (uno) nuestro sufrimiento como uno solo.
Tú, hija Mía necesitarás siempre Mis Gracias de fortaleza. Soportar esta misión y proclamar Mi Santa Palabra a un mundo ingrato, no será fácil. Se requerirá un gran sentido de determinación y coraje (valentía).
Esto se aplica a todos Mis discípulos, incluyendo a aquéllos quienes Me aman, pero que no aceptan estos mensajes.
Los obstáculos a los que te enfrentarás en esta parte de la misión aumentarán para todos vosotros, Mi devoto (fiel) ejército.
Debéis aceptar con dignidad, que cuando me seguís, vosotros sufriréis. Muy pocas almas pueden manejar el sufrimiento que afecta a todas las personas que se alínean a sí mismos con Mis Enseñanzas.
En este momento en el mundo, la sola mención de una Fe (creencia) en Mí, vuestro Jesús, crea vergüenza.
Esto, no sólo os causa incomodidad, cuando vuestra lealtad a Mí es declarada en público; sufriréis por causa Mía.
Recordad, sufrir es una gracia especial. Esto es muy difícil de soportar y muchas almas se alejan de Mí a causa de eso. Pero debéis recordar esto: Cuando sufrís en Mi Nombre, os sostendré y vertiré Mis Gracias sobre vosotros. A pesar de vuestros sufrimientos, esto os llevará una paz al alma.
Por favor, hija Mía, nunca te rindas. Nunca te sientas abandonada porque Yo estoy aún más cerca cuando te sientes sola. Estoy aún más cerca de ti durante estos tiempos de tormento. Debes seguir pidiendo por toda la ayuda que puedes obtener por solicitud a Mi amada Madre y a todos los santos para venir en tu ayuda.
Muy pronto aceptarás que el aumento en el sufrimiento es un resultado directo de la oposición a esta misión por el maligno. Él está extremadamente asustado porque su batalla llega a su fin. Él te odia por las almas que están siendo salvadas a través de esta misión de salvación.
Vuestro Jesús