28 may 2013 Mi voz, mientras resuena, atraerá a millones hacia Mí en la siguiente etapa, y después a miles de millones en las etapas finales
Traducción latinoamérica
Martes 28 de mayo de 2013 a las 20:30 hrs.
Mi amadísima hija, estoy preparando cada parte del mundo, ahora mismo, para Mi Segunda Venida. Barreré a toda nación - sin excluir ninguna- a Mis brazos de Misericordia de modo que pueda traerlas a Mi Reino.
Mi plan es muy detallado, y aun así, es simple. Mi voz, mientras resuena, atraerá a millones hacia Mí en la siguiente etapa, y después a miles de millones en las etapas finales. Muchos más oirán la Verdad ahora, pero no la aceptarán, hasta que lo que os he dicho suceda. Mi Misión se expandirá rápidamente y entonces, cuando todos sepan que soy Yo, Jesucristo, Quien hace este llamado desde el cielo, ellos se unirán a Mí. Mi misión será respondida, aún por aquellos que reniegan de estos mensajes.
Vosotros, Mis seguidores, pueden estar descorazonados debido al abuso que tendrán que soportar por Mí causa, pero no durará mucho. Mi amor por los hijos de Dios es tan grande, que puede ser comparado con el de un padre, que tiene una cantidad de hijos. Algunos hijos honrarán a su padre y a su madre y responderán al amor que se les demuestra. Otros hijos apartarán lejos a sus padres, tratarán mal a sus hermanos y hermanas, antes de que finalmente rompan todos los lazos. Debido a los lazos de sangre y amor, todo esfuerzo será hecho, no solo por los padres, sino también por los hermanos para atraer a esos hijos perdidos de regreso al seno de su familia. Y cuando eso suceda, todos los pecados, enojos y rechazos, serán olvidados.
Mis seguidores, ya que tendréis que enfrentar la ira de los demás, debéis permanecer pacientes y con calma. Vuestra perseverancia será probada, y algunos de vosotros os separaréis. Cuando lo hagáis, todo será hecho por Mis leales seguidores, para traeros de regreso, y así podáis responder a Mi llamado.
Vuestro amado Jesús
Barrer * = en esta caso se refiere a la acción de mover/dirigir/juntar a todas las naciones hacia los brazos de nuestro Señor Jesús