25 ene 2015 Dios Padre: Recibiré con los brazos abiertos a cada persona, cada raza, credo y religión
Domingo 25 de enero de 2015 a las 15:45 hrs
Mi muy querida hija, Mi intervención para abrir los ojos de Mis hijos al Amor de Mi Hijo amado, Jesucristo, está cada vez más cerca.
Amo a todos Mis hijos y Yo llamaré a todo hombre, mujer y niño mayor de siete años, a la Luz de la Misericordia de Mi Hijo. Prepárense para Mi Intervención porque está más cerca de lo que piensan y sean agradecidos por este Gran Regalo. La guerra espiritual que están presenciando en el mundo se manifiesta en la tierra y la batalla se librará entre Mis enemigos quienes tratan de silenciar a todos los que se rehúsan a dejarse llevar por las falsedades y aquellos que no traicionan a Mi Hijo.
Cuando la Mano de Mi Justicia caiga, esta pondrá a prueba la fe de todos los que dicen que son de Mi Hijo, y solo aquellos que estén dispuestos a seguir la Cruz seguirán siendo lo suficientemente fuertes para proclamar la Verdad. Dentro de poco las telarañas serán retiradas y el alcance total de su herencia se les dará a conocer. Mis enemigos, en su mayoría, rechazarán esta Intervención y van a luchar hasta el amargo final para negar a Jesucristo.
Recibiré con los brazos abiertos a cada persona, cada raza, credo y religión en la Luz de Mi Hijo y muchos Le verán. Como resultado, esto significará que muchos se convertirán y solicitarán el derecho a vivir la vida eterna, en la Gloria del Reino de Mi Hijo, en la Tierra.
He prometido que Mi Hijo ocupará Su Lugar en Su Trono y esto llegará a buen término. Los que no quieran formar parte de Su Reino harán su elección basada en el libre albedrío que les he dado a cada uno de ustedes.
Yo, su amado Padre, Creador de todo lo que es y será, ruego que no desperdicien su derecho con el que han nacido. Si lo hacen, serán devorados por Satanás que es tan despiadado así como mentiroso, engañador y acusador. A ustedes se les está dando un Regalo que a ninguna generación anterior a ustedes se le ha otorgado y deben rezar para que se les den las Gracias para aceptar Mi Favor.
Vengan a la Luz porque si no lo hacen se quedarán entonces ciegos en la oscuridad por la eternidad. Esto desgarraría Mi Corazón en dos, y Yo no deseo perder a ninguno de ustedes.
Les bendigo. Les guío a través de esta Santa Misión, que se les da por la Bendita y Santísima Trinidad, como fue predicho.
Su Padre amado
Dios Altísimo