23 jul 2013 Revelo los secretos contenidos dentro del Libro del Apocalipsis y no serán agradables

30.07.2013 22:55

 

Martes 23 de julio de 2013 a las 15:30 hrs.

 

Mi amadísima hija, las pruebas que tendrás que enfrentar son porque Yo revelo los secretos contenidos dentro del Libro del Apocalipsis y no serán agradables. La Verdad puede ser tan preocupante y perturbadora para muchos. La Verdad causará lágrimas de consternación, lágrimas de tristeza y gran aflicción.

 

Las mentiras, por otra parte, pueden tranquilizaros con un sentimiento de falsa seguridad. Incluso cuando las mentiras, presentadas a vosotros, vienen vestidas en lenguaje amoroso y gestos nobles, no se sienten bien en vuestro corazón, ellas son más fáciles para el hombre de aceptar que la Verdad.

 

Cuando a alguien se le dice que han sido infectados con una enfermedad terminal, ellos tienen dos opciones. Pueden aceptar la Verdad, preparar sus almas, dedicar tiempo en cercana proximidad con sus familias, buscar Mi Perdón y luego, esperar por el día. Cuando lo hacen así, aunque puede ser atemorizante, ellos, porque han aceptado la Verdad, encontrarán verdadera paz en sus almas. Estas almas no  tendrán nada que temer de Mí. Si, por otro lado, ellos rechazan la Verdad, y creen en pociones mágicas y en dioses falsos, que ellos piensan que pueden ser utilizados para curarlos milagrosamente, estarán muy decepcionados. Estas almas, enceguecidas por los así llamados pensamientos positivos, creen que si ellos se desean estar mejor, todo estará bien. Lo que fallan en entender es que a Mí deben llamar, a Jesús, si ellos desean ser sanados. Yo responderé las oraciones, pero solo si la petición es para el bien de sus almas. Estas almas, que rehúsan aceptar la Verdad de su enfermedad y que no regresan a Mí, estarán perdidas. Habrán desperdiciado el tiempo concedido a ellos en la Tierra, para asegurar que su casa esté en orden.

 

Lo mismo se aplica a Mi Palabra, la Verdad, dada a vosotros, ahora. Yo le di al mundo la Verdad, durante Mi Tiempo en la Tierra y fui rechazado. Muchos me siguieron, pero la Verdad, dada a ellos en ese momento, ahora será desafiada por los enemigos de Dios y ellos caerán víctimas del engaño. Pronto rechazarán la Verdad y no serán capaces de aceptar Mi Aviso, dado al mundo en este momento.

 

Recurro a vosotros, no para revelaros nuevas Enseñanzas, porque esto no es necesario. A vosotros se os dio la Verdad, pero ahora, intervengo para recordaros la Verdad. Yo también vengo para advertiros de las malignas atrocidades, que serán infligidas sobre vosotros debido a vuestro amor por Mí.

 

No volváis vuestras espaldas a Mí, Jesucristo, ya que os estoy alcanzando (contactando) solo para protegeros en este momento. No os quiero distanciar, pero me mantendré recordándoos la Verdad, una y otra vez. Cuando encontréis que vuestra alma se agita, como resultado de las nuevas reglas que serán presentadas por aquellos que dicen que son Míos, entonces debéis llamarme a través de esta Cruzada de Oración.

 

Cruzada de Oración (116) Sálvame de la maldad de las mentiras:

Querido Jesús, ayúdame

Me estoy ahogando en lágrimas de dolor.

Mi corazón está confundido.

No sé en quién puedo confiar.

Por favor lléname con Tu Santo Espíritu, para que pueda elegir el sendero correcto a Tu Reino.

Ayúdame, querido Jesús, a siempre permanecer fiel a Tu Palabra, dada al mundo por Pedro y a nunca desviarme de lo que Tu nos enseñaste, y a no negar Tu muerte en la Cruz.

Jesús, Tu eres el Camino.

Muéstrame el Camino.

Abrázame y llévame por Tu camino de Gran Misericordia. Amén.

 

Vuestro Jesús