17 oct 2011

21.10.2012 20:33

Mi regreso para salvarles será sentido en cada rincón del mundo

Lunes 17 de octubre del 2011 a las 21:30 hrs.

 

Mi muy amada y querida hija, los tiempos están cambiando alrededor tuyo. El mundo está convulsionado a causa del espíritu de las tinieblas. Estás rodeada de toda la evidencia de lo que la maldad del pecado puede cometer a la humanidad. En este espíritu de oscuridad, brillará el espíritu de Mi Divina presencia, mientras vengo a salvar a la humanidad otra vez.

 

Ustedes, Mis preciosos hijos, que conocen la verdad, deben decirle a los otros cuán afortunados son al serles dado este maravilloso y Divino don. Mi amor golpeará la Tierra de manera que caerán en la humildad y de rodillas llorarán de dolor, por el agravio causado al ofender a Mi Padre Eterno.

Es a través de Dios Altísimo, que este gran acto de Misericordia, es presentado a ustedes. Regocíjense porque ahora hay Luz en el mundo, la cual conducirá a las almas sucesivamente y dentro de los brazos de Dios Padre.

 

Vengo de nuevo, a darles la vida que necesitan para permitirles, una vez más, levantar sus ojos en adoración y alabanza a la gloria de Dios Padre y agradecerle la justicia que ahora muestra, a Sus preciados pero extraviados hijos.

 

Yo, Jesucristo, ahora Me preparo para permitirles ser testigos de la verdad de la Misericordia para todas las almas, incluyendo a los pecadores endurecidos y a los no creyentes en todas partes.

 

La prueba de Mi existencia y la de Dios Padre, será revelada en toda su gloria celestial, a cada hombre, mujer y niño.

 

Mi presencia se revelará en una forma que nadie podrá ignorar. Porque los cielos se abrirán, las estrellas colisionarán, para que Mi regreso a salvarles, sea sentido en cada rincón del mundo al mismo tiempo.

Oh, cómo se regocijarán Mis hijos, cuando ellos atestigüen Mi Divina presencia. Incluso aquellos en tinieblas, sentirán  Mi amor al tocar sus frías almas, el cual las  encenderá de nuevo.

Prepárense, esperen Mi Glorioso regreso. Recen por aquellos que tienen miedo en sus corazones. No Me teman. Esperen este gran evento con amor y humildad en vuestros corazones.

Les amo hijos, este gran Acto de Mi Misericordia se los demostrará.

 

Vuestro Amado Salvador, Jesucristo,

Rey de la Humanidad