16 oct 2012
Este es un momento difícil y solitario para los numerosos videntes y profetas porque cada uno trabaja solo
Martes 16 de octubre, 2012 a las 16:20 hrs.
Mi amadísima hija cuando digo que he enviado a Mis profetas al mundo, esto significa que a cada uno se le ha dado una misión específica. No hay dos misiones que se crucen.
Tú, hija Mía, como te he dicho, eres el último profeta. Que ninguno salga y afirme proclamar Mi Palabra, desde que tú recibiste tus mensajes, pues no se le ha dado esta autoridad por Mí.
Muchas pobres almas han decidido llamar la atención y, en algunos casos, para disminuir (restar) valor a estos Mensajes Santos, dados al mundo para ayudar a salvar a Mis almas.
Yo vengo a suplicar a los hijos de Dios que escuchen lo que tengo qué decir, pero no puedo obligaros a escucharme.
No puedo nunca mandar a los hijos de Dios a hacer algo porque esto no es posible, debido a que se les ha dado el Don del libre albedrío.
Todo lo que os pido es que abráis vuestros corazones y permitid que Mi amor llene vuestras almas. Quiero a todos vosotros, incluyendo a aquéllos quienes cometen actos de maldad, para que sepáis que os amo. Como tal, vuestra salvación es Mi prioridad. De cualquier manera, las profecías anunciadas en el Libro del Apocalípsis ya han comenzado.
Aquéllos que escuchan Mis instrucciones y responden a Mi Llamado pueden salvar muchas almas.
Mi deseo es que cada uno de vosotros venga a Mí y comparta (participe) en el Reino del Nuevo Paraíso.
Yo no condeno a los pecadores endurecidos, ni os pido a vosotros que los condenéis por ello, porque este no es vuestro derecho. Si condenáis y cuando condenéis a otro, vosotros no habláis en el Nombre de Dios. Si animáis a otros para juzgar a otras personas, para condenarlos, vosotros me rechazáis, a Mí,Vuestro Jesús
Os llamo a todos vosotros a escuchar a una sola voz en este momento. Mi Voz es todo en lo que vosotros debéis centraros si queréis salvaros a vosotros mismos, vuestras familias, amigos y vecinos. Todas las oraciones están siendo solicitadas ahora para ayudaros a vosotros y a vuestros seres queridos a prepararse para Mi Confesión, el Gran Aviso.
El tiempo está cerca.
Vuestro Jesús