14 oct 2012
18.10.2012 20:44
Aquéllos que realizan fríamente sangrientos asesinatos pueden ser salvados a través de vuestras oraciones
Domingo, 14 de Octubre 2012 a las 6:15 hrs
Mi muy querida hija, nunca creas, ni por un momento, que aquéllos que cometen pecados terribles y cuyas acciones diabólicas causan atrocidades en el mundo, no podrán ser salvados.
Aquéllos que realizan friamente asesinatos sangrientos, que ejecutan a sus compatriotas o que matan a sus propios hijos que aún están en el regazo materno, pueden ser salvados a través de vuestras oraciones.
Ésas son las almas que Yo más añoro.
Esas almas perdidas están separadas tan lejos de Mí que sólo será por medio del sufrimiento de almas víctimas, y de las oraciones de Mis discípulos, que ellas podrán ser salvadas.
Aún aquéllos, que a sabiendas, adoran a Satanás, y que saben que Yo existo pero continúan mofándose de Mí, también pueden ser salvados de la condenación eterna.
Yo urjo a todos vosotros a llamarme, mediante esta Cruzada de Oración para pedir redención por esas almas en pecado mortal que cometen homicidio.
Cruzada de Oración (80) Por aquéllos que cometen homicidio
Querido Jesús,
Suplico Misericordia por aquellos que cometen homicidio.
Te urjo por clemencia por aquellos que se encuentran en pecado mortal.
Te ofrezco mi propio sufrimiento y mis dificultades a Ti, para que puedas abrir Tu corazón y les perdones sus pecados.
Te pido que cubras con Tu Sangre Preciosa, a todos los que tienen intenciones(propósitos) diabólicos en sus almas, para que puedan ser lavados y limpiados de sus iniquidades.
Amén.
Recordad que aún cuando sus pecados puedan enfermaros, Mis seguidores, esas almas necesitan vuestra ayuda.
Ellos han sido infestados por el maligno y muchos de ellos no conocen la diferencia entre lo bueno y lo malo.
Esas son las almas que me causan la mayor angustia y pena. Mi sufrimiento está siendo extendido, para que cada uno de ellos pueda ser redimido.
Id, Mis discípulos y dejad que Mi amor y humildad fluyan en vuestros corazones para que podáis, mediante vuestra generosidad para sufrir, ayudar a salvar a estos pobres perdidos hijos de Dios.
Vuestro Jesús