08 ago 2011 Hijos, no se desanimen por los cuentos de desesperación que enfrenta la Humanidad
Lunes 8 de agosto de 2011 a las 19:45 hrs.
Mi muy querida bienamada hija, han pasado días desde que me comuniqué contigo. Esto fue para darte una oportunidad de escuchar el consejo de Mi amado Padre, Dios el Altísimo, para ayudarte a comprender la labor del sufrimiento para salvar almas.
Los días ahora, son cada vez más cortos, así como el tiempo para El Aviso se acerca. Todo está fijado para las Llamas de Mi amor, que envolverán al mundo entero como uno. Los ángeles, los coros en el Cielo, esperan ahora el Día de Gloria, cuando regrese a darle al hombre, su última oportunidad, para aceptar Mi Existencia y la de Mi Padre Eterno.
Hijos, no se desanimen por los rumores o cuentos de desesperación que está enfrentando la humanidad. En cambio, mírenme ahora y confíenme sus temores. A la humanidad se le dará un maravilloso Regalo. No solo se me encontrará cara a cara, sino que estarán llenos de alegría por aprender y ver la Verdad presentada delante de sus mismos ojos.
Este será un gran día en la historia, cuando la esperanza y el amor sean mostrados a todos ustedes. Incluso los más endurecidos pecadores se van a caer y llorarán lágrimas de remordimiento. Estas son buenas noticias, hijos, porque todos pueden ser salvados si abandonan su orgullo y su ego. Todos, a través de su propio libre albedrío, han de estar unidos para permitirme entrar en sus corazones, para que así puedan ser guiados hacia la Luz.
A muchos pecadores en pecado mortal, esta Luz les quemará sus ojos y su alma. Será doloroso. Si ellos tan solo pueden soportar el miedo de ver cómo me ofenden, se harán más fuertes y se convertirán.
Por tanto hijos de Mi Ejército, les digo ahora, sonrían porque el acontecimiento será el más extraordinario en sus vidas y su amor existente a Mí y a Mi Padre Eterno, inundará su alma. Tanto amor se infiltrará en sus mentes, cuerpos y almas, que ustedes serán renovados en el espíritu, para siempre. Recen ahora por todos ustedes, porque el tiempo es corto. El mundo está siendo preparado ahora para El Aviso, para que así todos estén aptos para Mi gran Regalo.
Continúen, hijos, con la devoción de este mes de la Salvación de Almas, para que al final de agosto, millones de almas sean salvadas, por sus esfuerzos.
Recuerden, hijos, Yo estoy presente en sus vidas, día a día, viendo, guiando. Amo a todos ustedes. Permanezcan fieles a Mis deseos, para salvar a las almas torturadas.
Jesucristo