06 mar 2012 Vean ahora cómo el hombre de paz se presentará al mundo

21.08.2013 00:15

 

Martes, 6 de marzo de 2012 a las 15:20 hrs.

Mi muy querida bienamada  hija, debes continuar llevando a cabo Mis Santas instrucciones y no dejar que ningún hombre te detenga en esta misión a pesar de que continuarás siendo atacada por todos lados.

Nunca dudes de Mi Palabra, incluso cuando no entiendas lo que Mis mensajes significan.

Todo lo que se te está siendo dado a tí para que el mundo lo oiga, ha sido predicho, hija Mía.

Es por eso que la Humanidad necesita comprender lo que está contenido en el Libro de Juan.

Todas las cosas predichas deben suceder.

Vean ahora cómo el hombre de paz se presentará al mundo.

Él será visto creando la paz en el Medio Oriente.

Ésta será una falsa paz y es un disfraz para la mentira que él muestre, con el fin de ocultar la verdadera razón de esta falsedad, que está siendo perpetrada.

Rezad por Mi Santo Vicario, el Papa Benedicto XVI, porque él enfrentará una terrible persecución. Éste momento está cerca ahora.

Rezar todos vosotros, porque vuestras Oraciones mitigarán la severidad de estos tiempos, que pueden ser diluidos.

Mucho es desconocido, hija Mía, acerca del Fin de los Tiempos.  

Muchos tienen miedo y así debería ser, pero sólo si sus almas están sucias.

Para aquellos de vosotros en la luz de Dios, tenéis mucho de que alegraros, porque esto significará el destierro del pecado de la Tierra.

Al final el mundo emergerá en un nuevo comienzo, lleno de Mi Luz Divina.

No hay mucho tiempo antes de que estas cosas se lleven a cabo.

Todo lo que importa es que todos los hijos de Dios verán la verdad a tiempo y se convertirán.

De cualquier otra manera ellos no serán parte del Nuevo Cielo y la Nueva Tierra, los cuales se fusionarán, para ser uno.

Para entonces Yo vendré a juzgar.

Así, sólo aquellos que Me reconocen a Mí, su Salvador Jesucristo y a Mi Padre Eterno, tendrán vida.

Rezad por todas sus almas. Ésto es todo en lo que necesitáis concentraros ahora mismo y confiar en Mí completamente.

Vuestro Jesús