024 mar 2014 Dios Padre: La hambruna, la cual azotará al mundo mientras el Tercer Sello es abierto, no se limitará a la falta de comida
Lunes 24 de marzo de 2014 a las 15:33 hrs.
Mi queridísima bienamada hija, la hambruna, la cual azotará al mundo mientras el Tercer Sello es abierto, no se limitará a la falta de comida para el cuerpo. La hambruna de la cual Yo hablo, será la falta de alimento y la debilidad del espíritu, a medida que la Verdad sea borrada por los enemigos que infiltran la Iglesia, creada en la Tierra por Mi Hijo, Jesucristo, en unión con Su Cuerpo.
Pronto, la Verdad se volverá(llegará a ser) confusa y el Espíritu Santo será reemplazado por el espíritu del mal. Aquellos que difundirán la nueva forma de falsa evangelización serán responsables por retener el Alimento de Vida de Mis hijos. Cuando se os prive del alimento de la Verdad, tendréis poco con que nutrir vuestra alma y entonces, con el tiempo, caeréis en el paganismo. Yo Estoy interfiriendo/interrumpiendo cada paso del proceso por el cual vosotros seréis guiados al error. Todo esfuerzo será hecho por Mí y traerá, a través de la Misericordia de Mi Hijo, a muchos de Sus siervos consagrados las Gracias que necesitan para discernir la Verdad de la ficción.
Así como Yo os alejo de Mi enemigo, muchos de vosotros encontraréis difícil manteneros fieles a la Palabra de Dios. Seréis atormentados por las dudas, la falta de valor para acatar/adheriros a la Palabra Santa y del terror de ser declarados como traidores de la Iglesia. La batalla por las almas será tan intensa como lo fue durante el Tiempo de Mi Hijo en la Tierra. La mayor dificultad será ocasionada por parte de los siervos consagrados de Mi Hijo debido a la deficiencia/falta de detectar el engaño en el interior de sus propios rangos. Y por eso, ellos, a causa de su tibia fe y falta de discernimiento, guiarán a muchos de sus compañeros clérigos hacia un grave error, como fue predicho.
Yo os declaro que el tiempo es corto. No os será concedido el tiempo necesario para atraer a todos Mis hijos a los Brazos Misericordiosos de Mi Hijo. A aquellos de vosotros que sois privilegiados por haberos sido dada la Gracia de reconocer el Regalo del Libro de la Verdad, mucho será, pues, lo que se espera de vosotros. A través de vuestra fe y confianza en Mí, vuestro bienamado Padre, ayudaréis a guiar a mis hijos de vuelta, para que así ellos acepten sin reparos(de buena gana) la Intervención de El Gran Aviso, cuando Mi Hijo abrace al mundo dentro de los Rayos de Su Gran Misericordia.
Esos tiempos están encima de vosotros y es hora de tomar vuestra armadura y luchar para que la Verdadera Palabra – la Verdad – sea conservada. Sin la Verdad no hay vida.
Vuestro Padre
Dios el Altísimo