021 nov 2014 Madre de la Salvación: Tengo un mensaje para el Clero Católico Romano
Viernes 21 de noviembre de 2014 a las 16:15 hrs.
Yo soy la Inmaculada Virgen María, la Madre de Dios - La Madre de la Salvación. Hoy, tengo un mensaje para el Clero Católico Romano y vengo a ustedes en nombre de mi Hijo amado, Jesucristo.
Convoco a todos los siervos consagrados de mi Hijo, que están a Su servicio en estos tiempos de grandes pruebas en la Iglesia.Ustedes son la vanguardia de Sus Santísimos Sacramentos y han sido llamados por mi Hijo para servirle en la salvación de todas las almas y, debido a esto, ustedes tienen una gran responsabilidad ante Él. Su deber debe ser siempre servir a mi Hijo y a Su Cuerpo - Su Iglesia - y asegurar que Su Santísima Palabra sea obedecida en todo momento.
Habrá momentos de gran dolor y persecución por delante y deben prepararse para esto ahora. En el futuro, su fe se pondrá a prueba hasta el límite y se les obligará a que estén de acuerdo para tomar un nuevo juramento donde se les pedirá mostrar lealtad a una nueva doctrina, que no será la de mi Hijo.
Aquellos entre ustedes, que reconocerán la doctrina falsa, cuando sea presentada ante ustedes no deben sucumbir a ella. Cuando se les indique adaptar y alterar los Santísimos Sacramentos, deben huir. La Iglesia de mi Hijo será puesta a prueba más allá de su resistencia. Para aquellos de ustedes que quizá descarten la Verdad en favor de una nueva doctrina modificada - la cual les dirán que es necesaria para satisfacer las necesidades de los hombres - sepan que esto será una gran traición a la Palabra de Dios.
Debido a los Santos juramentos que ustedes tomaron para estar al servicio de mi Hijo, tienen el deber con los hijos de Dios de alimentarlos con el Cuerpo y la Sangre de mi Hijo, Jesucristo. Llegará un tiempo, sin embargo, cuando ustedes serán obligados a modificar el Santo Sacrificio de la Misa. Habrá aquellos de entre ustedes que reconocerán, al instante, que un gran error está siendo cometido y por lo tanto deberán dar la espalda.
Deben seguir alimentando las almas de aquellos, que dependen de ustedes para alimentarlos con la Santísima Eucaristía. Si ustedes permanecen leales a mi Hijo y continúan sirviendo a los hijos de Dios, como es su deber, ustedes lo servirán a Él con gran dignidad. Les pido que recen Mi Santísimo Rosario todos los días para darles la fortaleza que necesitarán y para la protección contra Satanás, porque esos tiempos que vienen, que están casi sobre ustedes, llegarán a ser insoportables. Manteniendo la oración del Sello del Dios Vivo cerca de ustedes en todo momento, recibirán Protección adicional contra el maligno.
Habrá muchos sacerdotes entre ustedes que no van a encontrar el coraje (la valentía) para defender la Palabra de Dios, pero no deben nunca tener miedo de mostrar lealtad a mi Hijo. Si traicionan a mi Hijo, llevarán con ustedes almas inocentes, quienes se encontrarán a sí mismas, involuntariamente, siendo llevadas hacia el error y hacia una terrible oscuridad.
Satanás ha penetrado en la Iglesia de mi Hijo por algún tiempo, pero cada vez que el caos y la confusión que él causó se volvieron insoportables, esto fue aminorado debido a la fe de los amados siervos consagrados de mi Hijo. Ahora que la fe de muchos sacerdotes ha sido debilitada y, en algunos casos completamente destruída, las puertas del infierno se han abierto y un gran peligro se avecina.
No deben nunca estar tentados a renunciar a todo lo que mi Hijo enseñó. Mi Hijo nunca ha cambiado. Su Palabra permanece arraigada en la Roca sobre la que se construyó Su Iglesia. Sus Sacramentos llevan a las almas la Luz que ellos necesitan para mantener la vida. Si ustedes traicionan a mi Hijo, destruyen la vida misma porque sin la Presencia de mi Hijo el mundo hoy no existiría.
Bienaventurados sean los que verdaderamente aman a mi Hijo, porque ellos serán los que liderarán el camino con el ejemplo.
Su amada Madre
Madre de Salvación