02 feb 2014 Madre de la Salvación: Todos aquellos de distintas creencias deben empezar también a rezar mi Santo Rosario, porque les traerá a cada uno de ustedes gran protección

Domingo 2 de febrero de 2014 a las 17:09 hrs.

Mi queridísimos hijos, les pido que reciten/recen mi Santo Rosario cada día de ahora en adelante para proteger esta Misión de los ataques satánicos. Por recitar mi Santísimo Rosario, cada día, ustedes diluirán la maldad/perversidad de Satanás y de aquellos a quienes él influencia, cuando él intente alejar las almas de seguir esta Llamada especial del Cielo.

Todos aquellos de distintas creencias deben empezar también a rezar mi Santo Rosario, porque les traerá a cada uno de ustedes gran protección. El Santísimo Rosario es para todos y para aquellos que se quieran beneficiar de mi protección –el Regalo que he recibido de Dios para defender las almas del maligno.

Muchísimos de ustedes, queridos hijos, van a ser atormentados a menos que cedan. De otra manera, serán arrancados de esta Misión. Los enemigos de Dios utilizarán todo el poder que puedan, para detenerlos. Tirarán de ustedes, abusarán de ustedes con gritos y acusaciones de cosas malas. Ignoren esto y permítanme, a su bienamada Madre de la Salvación, darles consuelo y proveerlos con toda la protección que ustedes necesitan.

Durante la Misión de mi Hijo en la Tierra, Él fue traicionado de tantas maneras. Le esperaban en los pueblos, con piedras en las manos. Cuando Él entraba, con cientos siguiéndole, le lanzaban esas piedras desde detrás de refugios, para que nadie supiera quién había sido. Le odiaban; lo denunciaron a las autoridades de la Iglesia; promulgaron perversas mentiras sobre Él y dijeron que Él hablaba con una lengua malvada y blasfemaba contra Dios. A pesar de esto, ninguno de ellos podía explicar exactamente cómo es que era culpable de tales cosas. Entonces ellos pasaron mucho tiempo intimidando a Sus discípulos para que le negaran. Muchos de ellos lo hicieron. Luego, los Fariseos advirtieron a todos aquellos que adoraban en los templos, que, si continuaban siguiendo a mi Hijo, nunca jamás se les permitiría entrar en la Casa de Dios otra vez. Y muchos de ellos dejaron de seguir a mi Hijo. Estas mismas almas lloraron amargas y pesarosas lágrimas después de que mi Hijo fue Crucificado, porque fue solo entonces cuando se dieron cuenta lo equivocados que fueron con Él.

Lo mismo sucederá con esta Misión, la cual prepara el camino del Señor y el Gran Día para la Segunda Venida de mi Hijo. Todo esfuerzo será hecho para debilitar a la Iglesia Remanente. Toda tentativa se hará a fin de debilitar la determinación que ustedes tienen. Todo plan será creado para animarlos a que le den la espalda a su propia salvación y a la de los demás.

No deben nunca permitir que el espíritu del maligno apague su espíritu, debilite su fe o los aliente a negar a mi Hijo. Nunca pierdan la confianza en mi Hijo, o en Su Promesa de volver otra vez y traer al hombre un Nuevo Comienzo. Él nunca los defraudará. Él comprende lo difícil que es esto para todos ustedes, el dolor que soportan, así como también los sacrificios que hacen por Él.

Recuerden, ustedes son de Él, y cuando son verdaderamente parte de Él y se rinden/entregan a Él, ustedes llegan a ser parte de Su Luz. La Luz de Dios, presente en las almas, aleja las tinieblas que están presentes en otras almas. Cuando Satanás utiliza las almas de esta forma, él hace que su rabia se conozca y se sienta. Cuando la oposición se levante contra esta Misión, la cual está Bendecida por Dios, ellos nunca serán racionales, ni tranquilos. La histeria mostrada será un claro signo de que esta Misión es muy odiada por Satanás. Es por esto, que mi Santo Rosario debe ser recitado/rezado cada día, por todos ustedes, a fin de proteger esta Misión.

Confíen siempre en mis indicaciones, porque me son dictadas por mi Hijo, para ayudar a todos ustedes a tratar con/encargarse de las presiones que tendrán que soportar en Su Nombre.

Su bienamada Madre

Madre de la Salvación