017 oct 2014 Madre de la Salvación: Muchos serán despojados de sus títulos

13.02.2015 14:24

Viernes 17 de octubre de 2014 a las 15:30 hrs.

 

Mis queridos hijos, por favor recen por los leales siervos consagrados de mi Hijo mientras los futuros acontecimientos tienen lugar. Muchos serán despojados de sus títulos y enviados al desierto, en vergüenza/ deshonra. La agitación y la confusión se diseminará dentro de la Iglesia de mi Hijo, pero los traidores aumentarán en gran número y muchos los seguirán. Otras Iglesias Cristianas se acercarán a la recién adaptada iglesia, y luego todo será puesto en marcha para que una nueva religión mundial se levante. Esta nueva forma de iglesia, en un primer momento, parecerá ser un soplo de aire fresco para muchos que desean el cambio. A continuación, esto será evidente que solo sirve a los que quieren las Leyes de Dios cambiadas, con el fin de adaptarlas a sus vidas pecaminosas. Esta iglesia hará que se pierda toda la Fe. Contará con todas las apariencias de una nueva, renovada iglesia de Dios, pero todos los símbolos, los que tienen el propósito de glorificar a mi Hijo, ninguno de ellos estarán presentes.

Luego, cuando el tiempo se vuelva maduro, la nueva Única Iglesia Mundial se dará a conocer y será vista como una gran institución humanitaria. Estará intrínsecamente vinculada al mundo de la política y los negocios. Entonces aquellos que nunca pertenecieron a ningún credo se unirán a ella. ¡Cómo se van a alegrar, porque cada pecado será disculpado! y de esta manera mucha gente se sentirá aliviada, porque van a ser capaces de vivir sus vidas como lo deseen. Ya no tendrán que preocuparse con respecto a ofender a Dios porque no van a considerar al pecado como algo para preocuparse.

La nueva iglesia, con el fin de emanar un sentido de dignidad, promoverá obras humanitarias y de caridad y el mundo entero aplaudirá esto. Poco después, no habrá distinción entre esto y las alianzas políticas globales y las organizaciones empresariales, dedicadas a la filantropía.

Mientras tanto, la verdadera Iglesia de mi Hijo, así como fue edificada por Él, permanecerá viva pero debilitada. Pequeña en número, la Iglesia Remanente, nunca se dará por vencida, incluso cuando el Anticristo domine.

Recen, recen, recen para que los siervos consagrados de mi Hijo superen su miedo y se pongan de pie para proclamar la Verdad, incluso cuando sus voces sean ahogadas por aquellos que traicionan a mi Hijo.

Su amada Madre

Madre de la Salvación