011 jun 2014 Dios Padre: El Poder de la Santísima Trinidad está por encima de la interferencia del hombre
Miércoles 11 de junio de 2014 a las 12:25 hrs.
Mi queridísima hija, Mi Deseo es que cada uno de ustedes responda a la Llamada de la Santísima Trinidad en este momento. El Poder de la Santísima Trinidad está por encima de la interferencia del hombre y por la Gracia de Mi Amor, Yo me acerco a la humanidad para declarar la Verdad.
No tengan miedo de su Padre, porque Yo Soy suyo y ustedes son Míos. Todo el Poder está en Mis Manos y hago grandes excepciones a fin de unir al mundo. Muchas almas son indiferentes hacia Mí. Ellos me evitan, niegan Mi Existencia e insultan Mi Divinidad colocando falsos dioses – hechos de oro fundido – delante de Mí. Todo lo que está hecho de barro será reemplazado por una existencia renovada. Nada en esta Tierra es eterno. Todo vuelve a convertirse en polvo. Todo lo que es eterno no es de su mundo. Yo creé al hombre a Mi Semejanza. Yo soplé vida y a ustedes les fue dado el aliento, y Soy Yo Quien lo quitará. Todo empieza y termina Conmigo y ningún hombre puede dictar, ni dictaminará cómo Yo uniré a Mis hijos. Esa tarea es Mía – no suya. Mis Planes para salvar almas – las buenas, las malas y las desdichadas - no serán destruidos. Dañados, quizás, pero nunca arruinados, porque todo lo que Yo diga será y todo lo que Yo desee, sucederá.
Yo conozco a cada uno de ustedes, ya que ustedes fueron nacidos de Mi Amor. Cualesquiera que sean sus circunstancias, ellas evolucionan (se desarrollan) debido a la Divina Providencia, y hay un motivo para cada cosa. Aquellos de ustedes que no me conocen – son también Míos, porque Yo los creé. Ustedes no evolucionaron de las especies. Creer eso, es engañarse a ustedes mismos y eso sirve solo como un medio, plantado por el engañador en sus corazones, para negarme. Al negarme a Mí, su Padre Eterno, están negando la Salvación Eterna. Y negando la Verdad de Mi Existencia, se separarán ustedes mismos de la existencia de la Gloria eterna.
Toda la Misericordia es Mía. Yo derramo abundantemente Mi Misericordia sobre aquellos cuyos corazones son puros; que tienen amor en sus almas porque me han permitido entrar en ellos. El principal obstáculo para recibir la Vida Eterna es el orgullo de la humanidad. El orgullo es la única y más grande barrera para que ustedes mismos se unan a Mí. Puede que me conozcan, a través de Mi Hijo; comprendan Mi Palabra, pero no practican lo que les ha sido enseñado. El Amor viene de Mí. Cuando hay orgullo en el alma, el amor muere dentro de ella y es reemplazado por el odio. El orgullo viene de Satanás y es aborrecible para Mí, tanto como angustioso.
Dejen que los ame, al aceptar Mi Palabra y los Regalos que Yo dí al mundo por medio del mayor Sacrificio, el de la muerte de Mi Hijo en la Cruz. Yo les di Vida. Yo mismo me di a ustedes, mediante la Manifestación de Mi Hijo. Yo mismo me hice menos (me abajé) por humildad ante ustedes, a fin de derrotar el pecado del orgullo. Yo les enseñé a través de los profetas. Yo les di el Regalo del libre albedrío, pero ustedes abusaron de ello para satisfacer sus propias lujurias y deseos. El Regalo del libre albedrío tiene un propósito doble – darles la libertad de elegir, para que así no vengan hacia Mí por miedo, sino por amor, y para que derroten el poder del demonio. Es su libre albedrío lo que Satanás más desea de todo, y él utilizará cualquier engaño para lograr que ustedes se lo entreguen. Cuando las almas hacen esto a través de: el pecado del orgullo, las prácticas de la nueva era, y del ocultismo, ellas se vuelven esclavas del maligno. Luego, él se manifiesta dentro de aquellas almas que le entregaron su libre albedrío, en cada una de sus acciones. Ustedes los conocerán por su comportamiento. Pero la única señal de que su libre albedrío ha sido dado al maligno, es cuando estas almas buscan constante y públicamente burlarse de Mi Hijo, Jesucristo, y de Su Madre, la Inmaculada Virgen María, Madre del Mundo. Satanás desprecia a ambos.
Si, en su lugar, utilizan el libre albedrío que les di, para el bien de su alma y para amarse los unos a los otros, este es un poderoso medio con el que diluyen el poder de Satanás. Pero, son aquellas almas que me dan, a través de Mi Hijo Jesucristo, el regalo de su libre alberdío (voluntad), las que dan el regalo más poderoso de todos. Será a través de esas almas que Yo derrotaré al maligno y los instrumentos a través de los cuales Yo puedo salvar las almas de aquellos que se han separado completamente de Mí.
Esa es Mi Promesa. Yo salvaré las almas de, incluso, los casos más desesperados, gracias a los sacrificios de aquellos que me dan este regalo (esta ofrenda) de su libre albedrío, a través de Mi Hijo, Jesucristo.
Su Padre Eterno
Dios Altísimo